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Donald Trump, presidente electo de Estados Unidos, ha solicitado a la Corte Suprema una prórroga en la aplicación de la ley que obliga a ByteDance, empresa matriz de TikTok, a deshacerse de la aplicación en el país. A través de un amicus curiae presentado el viernes, Trump argumentó que su administración debería encargarse de decidir el futuro de la plataforma debido a los problemas de seguridad nacional y derechos de libre expresión involucrados.
El documento, presentado semanas antes de la audiencia programada para el 10 de enero de 2025, pide extender el plazo de la ley que exige la venta de TikTok antes del 19 de enero, un día antes de que Trump asuma el cargo como presidente. Según el escrito, Trump considera que el actual cronograma obstaculiza su capacidad de gestionar esta cuestión como parte de su mandato en política exterior y seguridad nacional.
El presidente electo sostuvo que el caso plantea una "tensión sin precedentes" entre el derecho a la libertad de expresión y las preocupaciones de seguridad nacional, y afirmó que, como próximo jefe del Ejecutivo, está en la posición más adecuada para abordar esta situación de manera política. En su solicitud, destacó que 170 millones de usuarios estadounidenses de TikTok ejercen su libertad de expresión en la plataforma, por lo que su cierre podría tener implicaciones significativas.
Asimismo, Trump señaló que su experiencia previa en negociaciones lo coloca como el líder idóneo para alcanzar un acuerdo que preserve tanto la seguridad nacional como los derechos constitucionales de los ciudadanos. En septiembre de 2024, había expresado su intención de salvar TikTok, llamando a sus seguidores a votar por él para garantizar su continuidad.
La ley, promulgada a principios de 2024, estipula que ByteDance debe deshacerse de TikTok antes del 19 de enero, fecha en la que las tiendas de aplicaciones en EE. UU. tendrían prohibido ofrecerla si no se cumple la venta. TikTok ha argumentado ante la Corte Suprema que esta legislación viola la Primera Enmienda, mientras que su iniciativa "Project Texas" busca abordar las preocupaciones de seguridad mediante el manejo de datos en servidores estadounidenses.
La audiencia en la Corte Suprema será clave para determinar si el plazo se extiende o si se mantiene la fecha límite, lo que podría definir el destino de la popular aplicación en el país.