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Movimiento Ciudadano anunció que presentará una iniciativa para que Acapulco sea declarado en emergencia climática, ante los daños recurrentes por fenómenos naturales como los huracanes Otis y John. La propuesta buscará que autoridades municipales y estatales prioricen acciones concretas contra el cambio climático, con medidas que vayan más allá de discursos.
Estefanía de Garay, secretaria nacional de Asuntos Ambientales del partido, destacó la urgencia durante el Torneo de Pesca de Basura Submarina realizado en la bahía. "Necesitamos recuperar playas y mares, pero también exigir políticas reales", afirmó. La actividad, organizada con voluntarios y activistas, recolectó desechos para visibilizar la contaminación costera.
Gabriela Bernal Reséndiz, coordinadora estatal del partido, confirmó que la iniciativa se promoverá mediante su bancada en el Congreso de Guerrero y con regidores. "Acapulco es un foco rojo. No podemos esperar otro desastre", señaló. El planteamiento incluirá tres ejes: reconocer la urgencia climática, modificar modelos de desarrollo basados en combustibles fósiles y acelerar acciones de adaptación.
Una declaratoria de emergencia climática obligaría a reorientar políticas públicas con metas verificables, como reducir emisiones contaminantes y proteger ecosistemas vulnerables. Expertos advierten que, sin cambios estructurales, el concepto podría quedar en simbología vacía, como ocurrió con términos como "sustentabilidad".
Acapulco enfrenta riesgos crecientes: además de huracanes más intensos, registra erosión costera, contaminación marina y presión urbana desordenada. Movimiento Ciudadano argumenta que el marco legal actual es insuficiente para atender estas amenazas, que requieren coordinación entre los tres niveles de gobierno.
