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El cadáver de Marisol Castro Gatica, una mujer de 29 años que había sido secuestrada en Guerrero, fue encontrado enterrado en un terreno de la colonia 24 de Febrero en Ixtapan de la Sal, en el Estado de México.
La víctima había desaparecido el pasado 8 de junio tras salir de su casa en Mecatepec, Teloloapan, Guerrero, con destino a una cita médica en Acapulco.
La desaparición de Marisol fue reportada por su familia después de que perdieran todo contacto con ella. Según los reportes, la última comunicación de Marisol con su familia fue la noche de su desaparición, cuando informó que ya había llegado a su destino y se disponía a descansar para regresar a casa al día siguiente.
Según reportes, la investigación dio un giro tras la detención de un hombre implicado en el secuestro, quien reveló la ubicación donde había sido abandonado el cuerpo de la mujer.
Equipos de la Comisión de Búsqueda de Personas del Estado de México, junto con efectivos de la Policía de Investigación, la Marina y la policía estatal y municipal, participaron en la búsqueda que culminó en el hallazgo del cuerpo de Marisol.
El cuerpo de Marisol fue descubierto envuelto en bolsas de plástico y en avanzado estado de descomposición.
El hallazgo se produjo tras extensas excavaciones realizadas por personal de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México en el sitio indicado por el detenido, ubicado en un camino de terracería de la mencionada colonia.
Tras el descubrimiento, los restos fueron trasladados al Instituto de Servicios Periciales de la sede regional en Tenancingo, donde se realizarán los estudios forenses necesarios para determinar la causa exacta de la muerte.