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La empresa minera Equinox Gold anunció que, de no recibir la ratificación de los acuerdos por parte de los ejidatarios de Carrizalillo, procederá con el cierre ordenado de la mina Los Filos, ubicada en el municipio de Eduardo Neri. El anuncio fue hecho mediante un comunicado enviado a los representantes del ejido, en el que la empresa reiteró su compromiso de cumplir con las regulaciones ambientales y de restauración del sitio.
En el documento, Greg Smith, presidente y CEO de Equinox Gold, recordó que las comunidades de Mezcala y Xochipala ya ratificaron los acuerdos alcanzados el 29 de enero de este año, mientras que Carrizalillo aún no ha sometido el acuerdo a votación en su asamblea. “Solicito respetuosamente confirmar si tienen la intención de hacerlo, ya que sin ello, debemos continuar con un cierre ordenado de la mina”, señaló Smith.
El cierre de la mina, programado para el 31 de marzo, marca el fin del convenio de arrendamiento de tierras entre la empresa y los ejidatarios. Equinox Gold aseguró que el proceso de cierre y restauración se realizará conforme a las regulaciones vigentes y bajo la supervisión de las autoridades correspondientes.
El 29 de enero, ejidatarios de Carrizalillo, Mezcala y Xochipala firmaron una minuta de acuerdos con Equinox Gold para continuar con las operaciones de la mina Los Filos. Sin embargo, los ejidatarios de Carrizalillo denunciaron que la empresa pretendía reducir más del 90% el pago de renta por sus tierras, lo que generó desacuerdos y tensiones.
En semanas recientes, los ejidatarios de Carrizalillo han acusado a la empresa de presiones y amenazas para forzar la firma de un convenio que consideran desventajoso. En un comunicado del 2 de marzo, los representantes del ejido denunciaron que ejecutivos de Equinox Gold realizaron un mitin público en la comunidad, en el que intentaron persuadir a los habitantes para aceptar los términos de la empresa.
Los ejidatarios también han exigido compensaciones por los daños ambientales y sociales causados por la operación minera, incluyendo la restauración del suelo y el agua, así como la reparación de su patrimonio ancestral afectado por las actividades de la mina.
Los ejidatarios de Carrizalillo han manifestado su disposición a negociar, pero bajo condiciones respetuosas y sin presiones. En un comunicado reciente, señalaron que no aceptarán convenios que consideren injustos y que, de no llegar a un acuerdo, comenzarán a trabajar en la rehabilitación de su territorio a partir del 1 de abril, cuando expire el convenio de arrendamiento.
