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Continúa zozobra en Cuajinicuilapa, piden auxilio pobladores ante violencia

Este viernes, habitantes reportaron que los negocios del centro cerraron tras rumores de balaceras

Habitantes de Cuajinicuilapa, Guerrero, solicitaron la intervención urgente de las autoridades

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Habitantes de Cuajinicuilapa, Guerrero, solicitaron la intervención urgente de las autoridades estatales y federales ante la creciente violencia que afecta al municipio de la Costa Chica. Los pobladores, que han sido testigos de una serie de incidentes violentos, pidieron mayor seguridad y denunciaron que la vida cotidiana se ha visto gravemente alterada.

Este viernes, habitantes reportaron que los negocios del centro cerraron tras rumores de balaceras cercanas a la colonia Los Lirios, en la salida hacia Punta Maldonado. Las detonaciones, que habrían durado alrededor de una hora, causaron pánico entre los residentes. Aunque videos en redes sociales captaron el sonido de disparos, hasta el momento las autoridades no han confirmado el origen de los mismos.

En una visita reciente, el pasado 9 de octubre, la gobernadora Evelyn Salgado Pineda fue informada de la situación de inseguridad en la región. Durante su estancia en Cuajinicuilapa, la mandataria supervisó la entrega de ayuda humanitaria a las familias afectadas por el huracán John y aseguró que su administración continuaría trabajando en la rehabilitación de caminos y la entrega de apoyos. Sin embargo, varios ciudadanos aprovecharon la ocasión para entregarle una solicitud de mayor seguridad en el municipio.

Los recientes hechos de violencia incluyen el asesinato de tres policías y el atentado contra el tesorero municipal, Roberto Avelino Vargas, quien huyó de la localidad tras recibir amenazas. A pesar de la presencia de la Policía Estatal, la Guardia Nacional y el Ejército, los habitantes señalan que las medidas de seguridad no han sido suficientes.

Además, la inseguridad ha afectado el sistema educativo, con la suspensión de clases desde hace más de un mes debido a las amenazas del crimen organizado contra los maestros. Aunque se intentó reanudar las actividades escolares el 14 de octubre, las clases fueron nuevamente interrumpidas por la aparición de listas de profesores amenazados.

Los habitantes de Cuajinicuilapa expresaron su desesperación ante la falta de respuesta efectiva y solicitan a la gobernadora Salgado y al gobierno federal mayor protección para garantizar la seguridad en la región.

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