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En el mercado Baltazar R. Leyva Mancilla de Chilpancingo fueron desmanteladas 21 cámaras de videovigilancia parásitas, en el acceso a las carnicerías y en pasillos de la central de abastos.
De las 11 de la mañana a las 3 de la tarde, personal del Ejército recorrió esa central de abastos y se entrevistó con los locatarios para saber si las cámaras eran propiedad del gobierno municipal o de de la administración del mercado.
Los locatarios habían alertado que en los accesos del mercado Baltazar R. Leyva y sus principales naves había cámaras de video instaladas por supuestos integrantes del crimen organizado.
La semana pasada en el área de carnes hubo dos ataques a balazos contra policías, distribuidores de producto y tablajeros.
Allí asesinaron al policía auxiliar Damián Huaxtitlán, al presidente de la Unión de Tablajeros y Comerciantes de Chilpancingo, Daniel Lorenzo Campos Nava, dentro de su carnicería; uno de sus empleados Alex Trujillo Morán y un empleado de la dirección de gobernación que se encontraba cerca del lugar.
Bajo Palabra
También en mercado de la calle República del Salvador, en el centro de Chilpancingo, fue asesinado un repartidor de pollo fresco, Luis N, de 40 años, cuando empezaba su jornada laboral.
La FGE informó el domingo pasado que cinco hombres con armas cortas y una de alto poder fueron detenidos en Chilpancingo por su presunta participación en el homicidio del policía auxiliar estatal perpetrado el 19 de marzo en el mercado Baltazar R. Leyva Mancilla.
Desde 2023, la ciudad de Chilpancingo ha vivido episodios de violencia criminal extrema, desde masacres hasta el asesinato del presidente municipal Alejandro Arcos Catalán, seis días después de rendir protesta.
La acción para retirar cámaras parásitas fue hecha por efectivos del Ejército y de la Guardia Nacional, acompañados de la Policía Municipal de Chilpancingo y la Policía Investigadora Ministerial de la Fiscalía General del Estado (FGE).
